Maravillosas son las cosas
que el hombre puede hacer
al amparo de la PAZ.
El hombre para el hombre,
en un formidablemente simple
y sentido apreton de manos,
o en el calido abrazo de siempre,
de queridos HERMANOS.
...Y la sonrisa y la alegria de todos
vale mucho mas que cualquier placer de la vida.
Es ahi donde el hombre es GIGANTE,
porque vale lo que es: sencillamente
una criatura que no se olvida del AMOR...
Escrito, originalmente el 22/04/1979.
No hay comentarios:
Publicar un comentario